Por lo menos el 50% de las ventas realizadas en Jamar durante 2020, se logró gracias a este modelo.
El mundo y la forma de hacer negocios cambió drásticamente con la llegada del coronavirus. Uno de los más notorios fue la forma en la que se ofrecen los distintos productos y/o servicios, los cuales tuvieron que migrar de los establecimientos físicos a la virtualidad, con todo lo que ello implica.
El sector inmobiliario no fue la excepción, y mientras algunas tiendas multinacionales ya contaban con un sistema digital montado, otras empresas nacionales empezaron desde cero. Antes, para poder tener la asesoría de un vendedor sobre colecciones, diseños, cotizaciones, posibilidades de crédito, o cualquier duda en general, las personas debían acercarse a la tienda. Con la llegada del virus, se tuvo que crear un portafolio de canales para facilitar el contacto con cualquiera los asesores: ese fue el caso de Muebles Jamar, la mayor compañía de muebles en Colombia.
“Necesitamos de una pandemia para despertar y entender que el mundo había cambiado hace mucho; de tal manera que le apostamos a la creación de distintos canales de comunicación que permitieran a los clientes lograr una conexión con la compañía a través de un chat en la pagina web, un correo electrónico, asesoría a través de call center, redes sociales, agendar video llamadas, etc., con excelentes resultados, en Jamar por lo menos el 50% de las ventas durante 2020, se dieron gracias a este modelo” menciona Octavio Buelvas, Gerente de mercado de Mueblas Jamar.
Junto a todos estos cambios importantes que le permitieron sostenerse como compañía y negocio durante los meses más álgidos de la pandemia en el país, la marca colombiana también incursionó en la tecnología VR para brindar a sus clientes una mejor experiencia de compra a distancia: “lanzamos un piloto para los clientes conocidos de Realidad Virtual, en el que al escanear un código QR con su celular pueden ver en su pantalla de qué manera se verían los muebles que quisieran tener en su casa, ayudando así a dimensionar los espacios y de esta forma ‘probar’ los productos antes de comprarlos”, agregó Buelvas.
De acuerdo con cifras de la compañía, el negocio cambió de tal forma que más del 90% de las personas que visitan las tiendas actualmente, primero visitaron la página web o las redes sociales de la compañía, “esto es para nosotros un cambio positivo, porque no solo los clientes llegan con más claridad de lo que quieren, también nos dio la oportunidad de crecer a nivel digital, teniendo en cuenta que hace unos años, el tráfico de las tiendas físicas en Jamar superaba nueve a uno al tráfico de la página web; ahora el tráfico de la página supera tres a uno al de las tiendas físicas”, explicó.
Finalmente, los 500 mil catálogos impresos al mes pasaron a cero y se trasladaron a las redes sociales, impactando no solo 1,5 millones de clientes, sino 8 millones en Facebook e Instagram y 1,5 millones de impresiones entre Google – Youtube.